Con Jerarquía

La noche venia complicada. Un invicto que defender. Peñarol no se rindió, reaccionó en el segundo tiempo y superó a Flamengo de Brasil 77 a 72 en el cierre del Grupo C de la Liga Sudamericana. Ambos equipos están clasificados para la siguiente instancia. Cuando las cosas no se daban, no perdió la calma, utilizó todo su oficio para dar con el juego que siempre lo caracterizó, pudo darlo vuelta y asi, festejar. 

Flamengo marcó el camino durante los dos primeros cuartos, pero en el segundo fue el local quien tomó las riendas, mejoró en el ataque lo que ayudó a desaparecer las chances que el visitante de llevarse el encuentro. Una defensa vital como siempre; en ofensiva aparecieron Teague, Gutiérrez y Mata, como ya es habitual. Al ver que Leiva tenía diferencia de talla a favor ante Shilton, el “Milrayitas” comenzó dándole juego a Ibarra, que pudo establecer una supremacía, pero el resto estuvo apagado. Entonces, el local le costó “castigar” las ayudas.
Flamengo, como contrapartida, tuvo en Benite a la figura del primer cuarto. El ayer base titular metió todo lo que tiró (10 puntos) e hizo jugar.
En el segundo, arrancó mejor el visitante otra vez. Y metió una corrida de 8 a 0, con un buen inicio de Caio y el goleo de Kojo (7). Del otro lado, a Peñarol le costó atacar y no encontró porcentajes desde lejos (Mata erró tres triples al hilo, algo poco común). La defensa rival lo obligó a eso y no hubo aciertos como para que tuviera que modificar el plan. Y aunque Hernández metió cambios, el dominio no cambió. El elenco brasileño controló al marplatense.
Peñarol sabía que la imagen no había sido la mejor. Entonces salió al tercer cuarto a intentar revertirla. Y desde su defensa, pudo “secar” al rival, que no anotó en los primeros 3 minutos.
En ataque, el local buscó variantes con los rompimientos de Teague y volvió a hallar a Leiva, para meter un 8 a 0 y situarse cerquita (40 a 38). Con Teague como arma principal (10 puntos en el cuarto) e Ibarra en la conducción, Peñarol empató en 46.
Con el ánimo bien arriba y la aparición de tres triples (dos de Gutiérrez y uno de Mata), el local encontró el empujón necesario para afirmarse en el dominio por primera vez en el partido y sacar seis de luz al sonar la chicharra (57 a 51).
La buena tarea integral la extendió al último cuarto. Entonces, si bien el rival se arrimó en el cierre (75-71), algunas apariciones de Gutiérrez, dos libres de Campazzo tras un triple errado por Caio y la calma que le otorgó el resultado a favor, el “Milrayitas” llegó a un nuevo triunfo que le alimenta el ego.

Fabián Baca

@FebaDeportes