Un equipo difícil
“Más
allá de que venimos del interior somos un equipo grande, logramos cosas
importantes”, declaró Zielinski en los grandes medios. Y tiene toda la razón, si
hay un rival complicado y molesto ese es el
Pirata de Córdoba.
El
empate en la Bombonera dejó saldo positivo en el plantel del Ruso, ya que se consiguió volver con un
punto de una cancha muy difícil. Si bien Boca jugó mejor, el Celeste pudo haberlo ganado en algún arrebato del final, lo que
dejó satisfecho al entrenador.
¿Por
qué es tan dificultoso vencer a Belgrano? Porque los jugadores saben leer el
encuentro. Están preparados para descifrar en qué momento replegarse, en que
circunstancia ser punzantes en ataque y en qué situación tener posesión del
balón.
Todo
amante del fútbol sabe que estos condimentos hacen de un contrincante alguien
indeseado para cualquiera. Por eso, se deduce que el DT puede influir mucho en
sus dirigidos, algo que no es para nada fácil.
Los
jugadores no parecen necesitar indicaciones tácticas para saber qué hacer en el
tiempo adecuado. También eso se debe a
la experiencia que generalmente hay en el campo de juego: Olave 37 años, Turus
31, Teté González 34, Farré 32, entre otros.
Del
mismo modo, es imprescindible también el aporte de frescura de los más jóvenes
como Luciano Lollo (26), Lucas Melano (19), Lucas Pittinari (21), Fernando
Márquez (25), etc.
Equilibrio
es la palabra que más encaja con este equipo, que a 9 fechas del final ya
cumplió el objetivo que se propuso: llegar a los 50 puntos en la temporada.
Números que ya le quedan chicos.
Por Diego Maio
Etiquetas: Belgrano, Diego Maio, Primera A
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio