Federer y una victoria histórica
El número dos del mundo
superó por 6-4, 7-6 (5) y 6-1 al local Bernard Tomic y alcanzó su triunfo 250
en Grand Slams. Roger llega a los octavos de final del Abierto de Australia,
donde enfrentará al canadiense Milos Raonic, sin perder sets ni ceder su
servicio.
Una vez más, Roger Federer dio cátedra en el Melbourne Park. Se medía ante
el australiano Bernard Tomic, un rival de temer.
No sólo porque era el local,
sino también por su alto nivel de tenis. Invicto en el año, el tenista de 20
años esperaba ansioso el duelo ante el suizo.
“Habrá que ver si Federer llega a la tercera rueda”, había dicho cuando
conoció el cuadro del torneo. Roger no sólo accedió a esa instancia, también
superó a su joven contrincante. La victoria del segundo cabeza de serie fue por
6-4, 7-6 (5) y 6-1. El ganador del Abierto de Australia en 2004, 2006, 2007 y
2010 mostró un juego sólido desde el saque (ganó 71 de los 95 puntos que
disputó con él). Además, solventó todas las dificultades que podría haberle
puesto en el camino el australiano: no lo dio libertades, lo incomodó tanto que
no lo dejó ejecutar golpes profundos y lo movió por todo el ancho de la cancha.
Sólo sufrió en el segundo parcial, donde Tomic mostró un gran tenis, pero no le
alcanzó.
La serenidad de Roger pudo más y llegaron al tie break, donde Federer
levantó un 2-5 son solvencia. Ya en el tercer set, con un Bernard abatido y
golpeado mentalmente por habérsele escapado el segundo, fue todo a merced del relojito suizo. Manejó los hilos y se
movió por el court como si estuviera en una pista de ballet. La soltura de sus
golpes demostró la confianza que tiene en su juego. Cabe resaltar que es de
mucha ayuda para su físico que los partidos duren poco: hasta este encuentro,
llevaba sólo 202 minutos en cancha. Otro aspecto favorable que deja Federer Express de cara a la segunda
semana es que no cedió su servicio ni perdió sets en este Abierto de Australia.
Roger está en los octavos de final de un torneo grande por 35° vez
consecutiva (no cae antes desde Roland Garros 2004. Ahora, tendrá en frente a
Milos Raonic, quien venció a Phillipp Kohlschreiber por 7-6 (4), 6-3 y 6-4.
Ante el canadiense, su récord es de tres victorias y ninguna derrota, todas en
2012. Sin embargo, siempre empezó perdiendo: en los Masters 1000 de Indian
Wells y Madrid, Roger superó al tenista de 22 años por 6-7 (4), 6-2 y 6-4; y
4-6, 7-5 y 7-6 (4), respectivamente. El último duelo entre ambos fue en Halle:
6-7 (4), 6-4 y 7-6 (3) para Federer.
Estas no son todas las novedades que envuelven a Roger Federer. Su Majestad
consiguió anoche, con la victoria ante Tomic, su triunfo número 250 en Grand
Slams, sobre 287 enfrentamientos. Sí, con 17 títulos y 24 finales en su haber,
el suizo alcanzó esa suma de éxitos en 54 participaciones en torneos grandes:
su primera corona de esta talla fue en Wimbledon 2003 y, diez años después, va
en busca de su decimoctavo Grand Slam.
Por Martin Mena
Etiquetas: Grand Slam, Martin Mena, Roger Federer, Tenis
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