La pasión que cambió la historia
La noche del 5 de marzo llegó la noticia mas dura y dolorosa. Todos conocían el delicado estado, pero nadie aceptaba un final tan trágico. “Ha dejado de existir Racing Club”, fueron las palabras de la síndico Liliana Ripoll que detuvieron el corazón de cada hincha académico en cada rincón del planeta. El tiempo pareció detenerse en al aire.
¿Sería un sueño?
¿Podía ser real?
¿Racing había dejado de existir?
Los corazones quebrados se acercaron a la sede para reclamar por la vida que les estaban quitando, para pedir que no desconecten a su amado Racing, que todavía estaba vivo. La justicia ordenó la clausura del club y la liquidación total de los bienes en cuatro meses. La Acadé no podía participar del torneo. Desde la AFA se anunció que se suspendería y reprogramaría la 1º fecha ante Talleres de Córdoba.
La sentencia estaba dictada, el Racing Club de Avellaneda tenía que ser ejecutado.
La tarde del 7 de marzo, dos días después de la noche mas oscura del club, se iniciaba el torneo Clausura 2009, sin Racing. ¿Sin Racing?
Más de 30 mil hinchas académicos coparon el "Cilindro”, negándose a la desaparición del club. Racing, por la prohibición judicial no podía jugar, pero poco le importo a sus hinchas que hicieron estallar el estadio.
La pasión se dio cita en Avellaneda. Racing estaba vivo, vivo por su hinchada, que se negaba a ver la realidad, que quería mostrarle al mundo la verdadera historia, que Racing, era Racing, no por sus dirigentes, no por los resultados, no por la economía, Racing era Racing, por su gente.
Mientras la “Academia” esperaba con la cabeza baja la ejecución del verdugo, se escuchó un estruendo. Un griterío que venía del barrio de Avellaneda, venía del cilindro. Un estadio repleto gritaba que Racing estaba vivo, mientras los traidores se escondían. Miles de banderas y trapos blancos y celestes iluminaban el cielo del fútbol argentino. Los duros de corazón se quebraron en un llanto encendido de amor. Los tímidos, perdieron la compostura y con la camiseta en la mano revoleándola al viento, dejaron la voz en un canto empapado de fe. La tristeza se transformó en esperanza. El dolor, la impotencia y la bronca, se mezclaban con el amor hacia la camiseta.
A vos académico, ¿Qué te puedo explicar lo que es el amor, si cuando a tu club lo quisieron asesinar, diste la vida por él, con el estadio repleto? ¿Cómo puedo explicarte lo que es la pasión, si llenaste tu cancha ese día que no hubo partido, porque les prohibieron jugar? ¿Cómo podría contarte qué es la fe, si creíste que ni el descenso ni las quiebra los iba a detener, y dos años después serían campeones? ¿Cómo puedo contarte lo que es ser hincha si a pesar de los malos resultados, son cada vez más los que aman esa camiseta?
El 7 de marzo de 2009 marcó para siempre la historia del Club. La pasión se dio cita en el cilindro. Más de 30 mil hinchas. Jugadores: Zanetti, Reinoso, Morales, Quiroz, Michelini. Históricos del Club: El "Pato” Filiol, el “Chango" Cárdenas, Maschio. Todos juntos le dijeron “NO” a la desaparición del club, y cerraron la cita de amor con su equipo, en un abrazo simbólico al estadio. Desde aquella tarde, cada 7 de marzo se recuerda que el hincha de Racing es distinto, y quedó demostrado, que no podrán separarlo de su amor tan fácilmente...FELIZ DÍA DEL HINCHA DE RACING.
Federico Alvarez
@fedealvarez7
Etiquetas: Federico Alvarez, Racing
2 comentarios:
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jajajajaa, que la Academia... No existe más.
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