sábado, 10 de agosto de 2013

Bayern comenzó de la mejor forma

Por Nicolás Galliari

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Alaba, Kroos, Ribery y Robben festejan el primer gol del partido, el de Arjen
En el debut de Pep Guardiola en la Bundesliga, el Bayern Munich derrotó 3-1 al Monchengladbach. En el medio, una jugada insólita con doble penal le dio tranquilidad en el desarrollo del encuentro.

El último campeón dio el puntapié inicial. La Bundesliga comenzó, la liga que ha ido en crecimiento en la última década, la que en cada jornada tiene cada estadio repleto, con un juego ofensivo por parte de casi todos los equipos, con las figuras que ya están y con las que han llegado.

Y una de las estrellas que se ha sumado es Pep Guardiola al equipo que en la temporada pasada obtuvo todo lo jugado. Ese Bayern que a final de este mes tendrá Supercopa europea frente al Chelsea de Mourinho, ese que a final de año jugará el Mundial de Clubes en Marruecos, y que ansía repetir un año futbolístico como el que terminó en mayo.

Con ese objetivo en mente, el equipo bávaro inició una nueva etapa y lo hizo de la mejor manera. Enfrentando al Borussia Monchengladbach, ganó 3-1. Tuvo un gran comienzo de partido, pero con el transcurrir de los minutos aflojó en el desarrollo y por momentos corrió peligro la ventaja.

Aun así, siempre monopolizó la pelota y fue superior al rival. Igualmente, la tendencia se repite y los errores estuvieron en el fondo. Más allá de la fortuita jugada en la que el visitante empató, los zagueros no aportaron solidez en al última línea. En el medio, se paró solo Schwensteiger, con cuatro opciones adelante como Robben, Kroos, Muller y Ribery, y Mandzukic como punta bien definido.

A los 16 minutos, los de Pep ya ganaban 2-0, por los goles de Arjen y del croata Mario. Luego, sobre el final del primer tiempo vendría el descuento, en una jugada en la que Dante terminó convirtiendo en su propio arco tras un centro bajo desde un costado. Desde el comienzo del complemento hasta que el Bayern volvió a ser, el Monchengladbach tuvo algunas oportunidades claras.

La clave fue promediando la mitad de esa segunda etapa. Una jugada insólita. En el medio del área, la pelota pegó en la mano del defensor Fernández y el árbitro cobró penal. Pateó Muller y tapó muy bien con las piernas Ter Stegen ante un tiro al centro del arco. Pero no todo terminó allí, sino que en el rebote el mismo zaguero hizo lo mismo que había hecho hacía unos segundos, y hubo otro penal. Allí convirtió el gran lateral Alaba, el austríaco que está entre los mejores del mundo en su puesto, colocándola con clase al palo derecho del arquero, que se la jugó a la otra punta.

Una jugada salida del libreto le dio tranquilidad al último campeón germano que, si bien nunca fue inferior a su rival, sí pasó algún que otro sobresalto. Este equipo tiene mucha posesión de balón, es el estilo que le da Pep, aunque en los últimos metros sigue siendo la bestia de siempre, esa que era también cuando Jupp Heynckes era el director técnico.


Este resultado fue merecido a fin de cuentas y le da mucha tranquilidad a Guardiola, que dijo que “seguramente mejoraremos”. Además, expresó que todavía no tiene muy bien aceitado el idioma: “mi alemán todavía no alcanza para aclarar algunos conceptos”. De todas maneras, es el comienzo del entrenador en Alemania, y todo necesita un tiempo de estabilización, y siempre que se gana hay que cambiar, es imperioso renovar. Comenzó mal la temporada en la Supercopa alemana ante Dortmund, pero la liga la arrancó con todo.

Nicolás Galliari

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