Ofensa de "la Mole Moli" al boxeo
Por Yesica Palmetta
Pecaminosa, vergonzosa, la
actitud de Fabio Eduardo Moli
(44-9-0,29KO). El cordobés aplicó sus
120,600 kg sobre el ring de una forma, no sólo antideportiva, sino espantosa.
Perdió el título argentino de los pesados por descalificación al seguir golpeando a Matías Vidondo (16-1-1,14KO. 119,100kg)
una vez de rodillas y árbitro de por medio. El Club Atlético Talleres de
Remedios de Escalada se alzó ante la actitud de “La Mole Moli”, quien además agredió al público.
Cada deporte federado tiene su
reglamento que los deportistas como tales deben respetar, cosa que parece habérsele
olvidado al señor Moli ayer en la noche. Estás situaciones espantosas, de
violencia no pueden dejarse pasar, ya que no sólo generan agresión entorno al
deporte, sino que además transgiversan el espíritu, la esencia de este deporte frente a las miradas.
En los primeros momentos del
primer asalto el neuquino parecía deberse al respeto de la experiencia del
hasta entonces campeón nacional de los pesados. Hasta que su confianza pareció
alzarse en su ataque y casi finalizando la vuelta el árbitro Rodolfo Stella
inició la cuenta al cordobés. Para el segundo round ambos pómulos del monarca
estaban lastimados y sin embargo a lo anterior, salió a buscar su pelea. A
pesar de que el radicado en Rosario marcaba el ritmo de la pelea, ya se empezaban
a cerrar las acciones de ambos que mostraban la pesadez y cansancio de sus
cuerpos.
Para el tercer giro Moli lograba
contundencia en sus golpes que Vidondo empezaba a aguantar aunque en la corta
distancia saliera perdiendo con los
ganchos internos característicos de la Mole. Sin embargo, una nueva cuenta le llegó
al mediático boxeador. Suena la campana, segundos afuera ¡CUARTO ROUND! Y como queriendo borrar lo sucedido, salió al
ataque, mientras Stella seguía llamándole la atención por sus desprolijidades
que ya son costumbre ver en él, pero que no tenían más peso que el papelón que
luego terminarían en la quinta vuelta, convirtiendo a Vidondo en el nuevo dueño
de la corona argentina de la categoría.
En la cuarta vuelta Moli tuvo
otra cuenta más, lo que al parecer y suponiendo desde lo que se veía, hicieron
estallar su carácter al verse encerrado por el despliegue de un Vidondo más
tranquilo y hambriento de ganar y sumar este importante resultado a su próximo
título de doctor en medicina, con ya 36 años de edad.
Etiquetas: Boxeo, Polideportivo
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